"Escuchadme-dijo el demonio, poniendo su mano sobre mi cabeza-. El pais que te digo es una región lugrube . Encuentrase en Libia , junto a las orillas del Zaire . Alli no se encuentra descanso ni silencio."
E.A.Poe
lunes, 6 de diciembre de 2010
domingo, 10 de octubre de 2010
martes, 27 de julio de 2010
Soy muchacha de mala historia
Soy
La muchacha mala de la historia
La que fornicó con tres hombres
Y le sacó cuernos a su marido.
Soy la mujer
Que lo engaño cotidianamente
Por un miserable plato de lentejas,
La que le quitó lentamente su ropaje de bondad
Hasta convertirlo en una piedra
Negra y esteril
Soy la mujer que lo castró
Con infinitos gestos de ternura
Y gemidos falsos en la cama
Soy
La muchacha mala de la historia.
La muchacha mala de la historia
La que fornicó con tres hombres
Y le sacó cuernos a su marido.
Soy la mujer
Que lo engaño cotidianamente
Por un miserable plato de lentejas,
La que le quitó lentamente su ropaje de bondad
Hasta convertirlo en una piedra
Negra y esteril
Soy la mujer que lo castró
Con infinitos gestos de ternura
Y gemidos falsos en la cama
Soy
La muchacha mala de la historia.
Te beso en los ojos
te beso en los ojos en la cóncava mudez
[de tu inocencia
te beso y todo tu cuerpo se viste con flores
[de un canto primaveral,
te beso y conviertes las cosas en hechos
silenciosos y llenos de asombro,
te beso al fin
te beso.
[de tu inocencia
te beso y todo tu cuerpo se viste con flores
[de un canto primaveral,
te beso y conviertes las cosas en hechos
silenciosos y llenos de asombro,
te beso al fin
te beso.
Timida y Avergonzada
tímida y avergonzada
dejé que me quitaras lentamente mis vestidos,
desnuda
Sin saber qué hacer y muerta de frío
me acomodé entre tus piernas
¿es la primera vez?
preguntaste,
sólo pude llorar.
oí que me decías que todo iba a salir bien
que no me preocupara,
yo recordaba las largas discusiones de mis padres,
el desesperado llanto de mi madre
y su voz diciéndome
"nunca confíes en los hombres".
Comprendiste mi dolor
Y con infinita ternura
Cubriste mi cuerpo con tu cuerpo,
tienes que abrir las piernas, murmuraste,
y yo me sentí torpe y desolada.
(De Eros Nº 1, agosto de 1973)
dejé que me quitaras lentamente mis vestidos,
desnuda
Sin saber qué hacer y muerta de frío
me acomodé entre tus piernas
¿es la primera vez?
preguntaste,
sólo pude llorar.
oí que me decías que todo iba a salir bien
que no me preocupara,
yo recordaba las largas discusiones de mis padres,
el desesperado llanto de mi madre
y su voz diciéndome
"nunca confíes en los hombres".
Comprendiste mi dolor
Y con infinita ternura
Cubriste mi cuerpo con tu cuerpo,
tienes que abrir las piernas, murmuraste,
y yo me sentí torpe y desolada.
(De Eros Nº 1, agosto de 1973)
lunes, 26 de julio de 2010
"...me encontraste en la mitad de todos mis caminos
y avanzaste lentamente hasta inundar
todos los rincones de mi vida.
Ahora ,
Soy la mujer que sigue
Sigilosamente
Tus pasos
La que aguarda en cada esquina tu llegada ,
Soy la mujer incondicional
Que nada pide a cambio
La que siempre te recibe
Y te abre las piernas sin chistar.
Soy la mujer ,
Que guarda tus más gratos recuerdos ;
La que nunca olvidará tu nombre
Soy la mujer que conservará como un tesoro
Todos tus orgasmos
Tu desesperada forma de amarme.
Soy la mujer ,
Tu mujer
Y te amaré
Hasta entregarte toda mi piel ".
Maria Emilia Cornejo , "En la Mitad del Camino Recorrido"
y avanzaste lentamente hasta inundar
todos los rincones de mi vida.
Ahora ,
Soy la mujer que sigue
Sigilosamente
Tus pasos
La que aguarda en cada esquina tu llegada ,
Soy la mujer incondicional
Que nada pide a cambio
La que siempre te recibe
Y te abre las piernas sin chistar.
Soy la mujer ,
Que guarda tus más gratos recuerdos ;
La que nunca olvidará tu nombre
Soy la mujer que conservará como un tesoro
Todos tus orgasmos
Tu desesperada forma de amarme.
Soy la mujer ,
Tu mujer
Y te amaré
Hasta entregarte toda mi piel ".
Maria Emilia Cornejo , "En la Mitad del Camino Recorrido"
domingo, 25 de julio de 2010
LISA
Cuando Lisa me dijo que había hecho el amor
Con otro, en la vida cabina telefónica de aquel
Almacén de la Tepeyac, creí que el mundo
Se acababa para mí. Un tipo alto y flaco y
Con el pelo largo y una verga larga que no esperó
Más de una cita para penetrarla hasta el fondo.
No es algo serio, dijo ella, pero es
La mejor manera de sacarte de mi vida.
Parménides García Saldaña tenía el pelo largo y hubiera
Podido ser el amante de Lisa, pero algunos
Años después supe que había muerto en una clínica psiquiátrica.
O que se había suicidado. Lisa ya no quería
Acostarse más con perdedores. A veces sueño
Con ella y la veo feliz y fría en un México
Diseñado por Lovecraft. Escuchamos música
(Canned Heat, uno de los grupos preferidos
De Parménides García Saldaña) y luego hicimos
El amor tres veces. La primera se vino dentro de mí,
La segunda se vino en mi boca y la tercera, apenas un hilo
De agua, un corto hilo de pescar, entre mis pechos. Y todo
En dos horas, dijo Lisa. Las dos peores horas de mi vida,
Dije desde el otro lado del teléfono.
ROBERTO BOLAÑO
Con otro, en la vida cabina telefónica de aquel
Almacén de la Tepeyac, creí que el mundo
Se acababa para mí. Un tipo alto y flaco y
Con el pelo largo y una verga larga que no esperó
Más de una cita para penetrarla hasta el fondo.
No es algo serio, dijo ella, pero es
La mejor manera de sacarte de mi vida.
Parménides García Saldaña tenía el pelo largo y hubiera
Podido ser el amante de Lisa, pero algunos
Años después supe que había muerto en una clínica psiquiátrica.
O que se había suicidado. Lisa ya no quería
Acostarse más con perdedores. A veces sueño
Con ella y la veo feliz y fría en un México
Diseñado por Lovecraft. Escuchamos música
(Canned Heat, uno de los grupos preferidos
De Parménides García Saldaña) y luego hicimos
El amor tres veces. La primera se vino dentro de mí,
La segunda se vino en mi boca y la tercera, apenas un hilo
De agua, un corto hilo de pescar, entre mis pechos. Y todo
En dos horas, dijo Lisa. Las dos peores horas de mi vida,
Dije desde el otro lado del teléfono.
ROBERTO BOLAÑO
viernes, 9 de julio de 2010
viernes, 28 de mayo de 2010
Un acercamiento al yo
Nadie es alguiem , un solo hombre inmortal es todos los hombres . Como Cornelio Agripa , soy dios , soy héroe , soy filósofo , soy demonio y soy mundo , lo cual es una fatigosa manera de decir que no soy yo.
J.Luis Borges , "El inmortal"
J.Luis Borges , "El inmortal"
jueves, 20 de mayo de 2010
martes, 18 de mayo de 2010
lunes, 10 de mayo de 2010
Caminos del espejo - Alejandra Pizarnik
I
Y sobre todo mirar con inocencia. Como si no pasara nada, lo cual es cierto.
II
Pero a ti quiero mirarte hasta que tu rostro se aleje de mi miedo como un pájaro del borde filoso de la noche.
III
Como una niña de tiza rosada en un muro muy viejo súbitamente borrada por la lluvia.
IV
Como cuando se abre una flor y revela el corazón que no tiene.
V
Todos los gestos de mi cuerpo y de mi voz para hacer de mí la ofrenda, el ramo que abandona el viento en el umbral.
VI
Cubre la memoria de tu cara con la máscara de la que serás y asusta a la niña que fuiste.
VII
La noche de los dos se dispersó con la niebla. Es la estación de los alimentos fríos.
VIII
Y la sed, mi memoria es de la sed, yo abajo, en el fondo, en el pozo, yo bebía, recuerdo.
IX
Caer como un animal herido en el lugar que iba a ser de revelaciones.
X
Como quien no quiere la cosa. Ninguna cosa. Boca cosida. Párpados cosidos. Me olvidé. Adentro el viento. Todo cerrado y el viento adentro.
XI
Al negro sol del silencio las palabras se doraban.
XII
Pero el silencio es cierto. Por eso escribo. Estoy sola y escribo. No, no estoy sola. Hay alguien aquí que tiembla.
XIII
Aun si digo sol y luna y estrella me refiero a cosas que me suceden. ¿Y qué deseaba yo?
Deseaba un silencio perfecto.
Por eso hablo.
XIV
La noche tiene la forma de un grito de lobo.
XV
Delicia de perderse en la imagen presentida. Yo me levanté de mi cadáver, yo fui en busca de quien soy. Peregrina de mí, he ido hacia la que duerme en un país al viento.
XVI
Mi caída sin fin a mi caída sin fin en donde nadie me aguardó pues al mirar quién me aguardaba no vi otra cosa que a mí misma.
XVII
Algo caía en el silencio. Mi última palabra fue yo pero me refería al alba luminosa.
XVIII
Flores amarillas constelan un círculo de tierra azul. El agua tiembla llena de viento.
XIX
Deslumbramiento del día, pájaros amarillos en la mañana. Una mano desata tinieblas, una mano arrastra la cabellera de una ahogada que no cesa de pasar por el espejo. Volver a la memoria del cuerpo, he de volver a mis huesos en duelo, he de comprender lo que dice mi voz.
Y sobre todo mirar con inocencia. Como si no pasara nada, lo cual es cierto.
II
Pero a ti quiero mirarte hasta que tu rostro se aleje de mi miedo como un pájaro del borde filoso de la noche.
III
Como una niña de tiza rosada en un muro muy viejo súbitamente borrada por la lluvia.
IV
Como cuando se abre una flor y revela el corazón que no tiene.
V
Todos los gestos de mi cuerpo y de mi voz para hacer de mí la ofrenda, el ramo que abandona el viento en el umbral.
VI
Cubre la memoria de tu cara con la máscara de la que serás y asusta a la niña que fuiste.
VII
La noche de los dos se dispersó con la niebla. Es la estación de los alimentos fríos.
VIII
Y la sed, mi memoria es de la sed, yo abajo, en el fondo, en el pozo, yo bebía, recuerdo.
IX
Caer como un animal herido en el lugar que iba a ser de revelaciones.
X
Como quien no quiere la cosa. Ninguna cosa. Boca cosida. Párpados cosidos. Me olvidé. Adentro el viento. Todo cerrado y el viento adentro.
XI
Al negro sol del silencio las palabras se doraban.
XII
Pero el silencio es cierto. Por eso escribo. Estoy sola y escribo. No, no estoy sola. Hay alguien aquí que tiembla.
XIII
Aun si digo sol y luna y estrella me refiero a cosas que me suceden. ¿Y qué deseaba yo?
Deseaba un silencio perfecto.
Por eso hablo.
XIV
La noche tiene la forma de un grito de lobo.
XV
Delicia de perderse en la imagen presentida. Yo me levanté de mi cadáver, yo fui en busca de quien soy. Peregrina de mí, he ido hacia la que duerme en un país al viento.
XVI
Mi caída sin fin a mi caída sin fin en donde nadie me aguardó pues al mirar quién me aguardaba no vi otra cosa que a mí misma.
XVII
Algo caía en el silencio. Mi última palabra fue yo pero me refería al alba luminosa.
XVIII
Flores amarillas constelan un círculo de tierra azul. El agua tiembla llena de viento.
XIX
Deslumbramiento del día, pájaros amarillos en la mañana. Una mano desata tinieblas, una mano arrastra la cabellera de una ahogada que no cesa de pasar por el espejo. Volver a la memoria del cuerpo, he de volver a mis huesos en duelo, he de comprender lo que dice mi voz.
miércoles, 28 de abril de 2010
A la espera de la oscuridad-Alejandra Pizarnik
Ese instante que no se olvida
Tan vacío devuelto por las sombras
Tan vacío rechazado por los relojes
Ese pobre instante adoptado por mi ternura
Desnudo desnudo de sangre de alas
Sin ojos para recordar angustias de antaño
Sin labios para recoger el zumo de las violencias
perdidas en el canto de los helados campanarios.
Ampáralo niña ciega de alma
Ponle tus cabellos escarchados por el fuego
Abrázalo pequeña estatua de terror.
Señálale el mundo convulsionado a tus pies
A tus pies donde mueren las golondrinas
Tiritantes de pavor frente al futuro
Dile que los suspiros del mar
Humedecen las únicas palabras
Por las que vale vivir.
Pero ese instante sudoroso de nada
Acurrucado en la cueva del destino
Sin manos para decir nunca
Sin manos para regalar mariposas
A los niños muertos
Tan vacío devuelto por las sombras
Tan vacío rechazado por los relojes
Ese pobre instante adoptado por mi ternura
Desnudo desnudo de sangre de alas
Sin ojos para recordar angustias de antaño
Sin labios para recoger el zumo de las violencias
perdidas en el canto de los helados campanarios.
Ampáralo niña ciega de alma
Ponle tus cabellos escarchados por el fuego
Abrázalo pequeña estatua de terror.
Señálale el mundo convulsionado a tus pies
A tus pies donde mueren las golondrinas
Tiritantes de pavor frente al futuro
Dile que los suspiros del mar
Humedecen las únicas palabras
Por las que vale vivir.
Pero ese instante sudoroso de nada
Acurrucado en la cueva del destino
Sin manos para decir nunca
Sin manos para regalar mariposas
A los niños muertos
martes, 13 de abril de 2010
Queda la noche -Soledad Puértolas(parte2)
//Al fin , volví a quedarme dormida , tratando inútilmente de volver al sueño del que había salido , a aquella dorada luz de la tarde que se reflejaba en la superficie de un río de color verde , no marrón , y sentir la presión de aquella mano en la mía y saber que un chico cualquiera se había convertido , para mí , en la persona más importante del mundo . ¿Por qué eso me parecía tan excepcional? La noche deforma los sueños , los procude , los ensalza y aveces los borra . Y , sobre todo , el alba , donde yo me quedé , dejando atrás mis escrúpulos , mis miedos , mi culpabilidad y toda la carga de vagos preceptos morales que la vida , cuando se pone seria , se empeña en que asumamos.//
//Los inicios : eso era lo que yo buscaba una y otra vez.Repetir el comienzo hasta el infinito . Asomada a mi terraza , fui perfectamente consciente de que las historias que mas me gustaba recordar eran las que menos habian durado : una sola noche , unas horas ; historias efimeras , sin pretensiones , sin proyeccion , sin consecuencias . En la continuidad , mi vida entera , mi posición en el mundo , se tergiersaba , y los afanes de dominio , provenientes de una u otra parte , perturaban y acababan destruyendo mi felicidad . La plenitud de ese momento se anterior se grababa , autosuficiente y unico , en mi interior , tan acabado como el discurrir de las viudas ajenas en mi imaginacion .//
//Los inicios : eso era lo que yo buscaba una y otra vez.Repetir el comienzo hasta el infinito . Asomada a mi terraza , fui perfectamente consciente de que las historias que mas me gustaba recordar eran las que menos habian durado : una sola noche , unas horas ; historias efimeras , sin pretensiones , sin proyeccion , sin consecuencias . En la continuidad , mi vida entera , mi posición en el mundo , se tergiersaba , y los afanes de dominio , provenientes de una u otra parte , perturaban y acababan destruyendo mi felicidad . La plenitud de ese momento se anterior se grababa , autosuficiente y unico , en mi interior , tan acabado como el discurrir de las viudas ajenas en mi imaginacion .//
domingo, 11 de abril de 2010
Thelema.02
La noche se desdibuja
como trazos entre las sombras
subyacen una y varias razones ,
a la vez , van cayendo
de a pocos , los ultimos titeres
de este mi escenario en vida .
como trazos entre las sombras
subyacen una y varias razones ,
a la vez , van cayendo
de a pocos , los ultimos titeres
de este mi escenario en vida .
lunes, 29 de marzo de 2010
Melocotones helados - Espide Freire
Existen infinitos modos de matar a una persona . Muchos de ellos son fáciles . Existe el olvido , llega la muerte . Se olvida todos los días , y los muertos son discretos . No regresan de la muerte . Ni del olvido . Olvidaron a Elsa tantas veces , tanta gente . A tantas Elsas , Simplemente , pasó su tiempo , continuó la vida y su lugar fue ocupado por otras cosas , por otras personas .
Hubiera sido inútil buscar culpables .
Hubiera sido inútil buscar culpables .
lunes, 8 de marzo de 2010
Queda la noche -Soledad Puértolas(parte1)
//la parte más interesante de la historia se había cumplido ya : el acercamiento , la aproximacion hacia que lo recurriendo a un eufemismo puede llamarse punto culminante , los preámbulos , la preparación , a distancia , todavía , de esa hipotética culminación o satisfacción , bastante relativa y muchas veces decepcionante cuando al fin es alcanzada , pero a la que debe tenderse porque , sino se obtiene , todo lo que ha precedido se disuelve subitamente en rencor , inseguridad y fastidio , estupenda materia para el olvido .
Lo que hace que la aproximación quede en nuestro recuerdo como la mejor y más rica de la etapas de las relaciones es , precisamente , la llegada a la meta . Lo que había hecho que mi relacion o aventura o lío con Fernando durara tanto había sido la sensacion de partir siempre de cero . Con él , yo estaba siempre a la espera de la aproximacion y del preambulo , simbolizada , reducida , a esa constante espera de su llamada . En cambio , para él no habia preámbulo , sólo metas . Sabía muy bien o que quería de mí y que lo obtendría con cierta facilidad . Esa desigualdad me obsesionaba , convertía en un reto cada encuentro con él e iba añadiendo dosis de decepción en cada despedida . Con Ishwar todo había ido discurriendo al mismo tiempo , nos habíamos instalado en el mismo ritmo , habíamos disfrutado confiadamente de preámbulos y metas y podíamos depedirnos con satisfacción , aunque con dolor , con pena , con nostalgía .
Nadé sin fuerzas , con desgana , sabiendo que desde la habitación vacia de Ishwar nadie escucharía el ruido del agua , nadie me echaría de menos .//
Lo que hace que la aproximación quede en nuestro recuerdo como la mejor y más rica de la etapas de las relaciones es , precisamente , la llegada a la meta . Lo que había hecho que mi relacion o aventura o lío con Fernando durara tanto había sido la sensacion de partir siempre de cero . Con él , yo estaba siempre a la espera de la aproximacion y del preambulo , simbolizada , reducida , a esa constante espera de su llamada . En cambio , para él no habia preámbulo , sólo metas . Sabía muy bien o que quería de mí y que lo obtendría con cierta facilidad . Esa desigualdad me obsesionaba , convertía en un reto cada encuentro con él e iba añadiendo dosis de decepción en cada despedida . Con Ishwar todo había ido discurriendo al mismo tiempo , nos habíamos instalado en el mismo ritmo , habíamos disfrutado confiadamente de preámbulos y metas y podíamos depedirnos con satisfacción , aunque con dolor , con pena , con nostalgía .
Nadé sin fuerzas , con desgana , sabiendo que desde la habitación vacia de Ishwar nadie escucharía el ruido del agua , nadie me echaría de menos .//
domingo, 21 de febrero de 2010
La voluntad (Extracto de la cruz de San andres)
//LA VOLUNTAD AYUDA MUCHO , esa es cosa bien sabida , aunque la voluntad jamás pueda suplir a la razón , la voluntad manda pero no discierne , la voluntad no sirve más que para decidir , sólo con voluntad no se dominan mundos , ni se derrota a la muerte , ni se desbanca el casino de Montecarlos , sólo con voluntad no se consiguen sino logros muy modestos , ganarse el pan , encauzar la fama , bailar el tango con una mediana mestría , cada cual se defiende como se lo permite su voluntad y como puede de sus cotidianos y mansísimos o domésticos sacrilegios , ninguno del todo bien ensayado . A los hombre y a las mujeres , a los caballos y a las yeguas , a los carneros y a las ovejas no les gusta la muerte , pero se sienten atraídos por la muerte , eso pasa también con los abismos de la tierra y los acantilados de la mar , nosotros lloramos a los muertos , pero los muertos ni nos lloran nise ríen de nosotros ni de nuestras tribulacion , la muerte acarrea insensibilidad e inercia , cuando alguiem se muere siempre alguiem se alegra , es el cruel axioma de los vasos comunicantes de la sangre , no se puede amenazar de muerte a quien no teme a la muerte //
sábado, 20 de febrero de 2010
Mi breve entendimiento de la pintura
"Un dia algunos pelos de mi pincel se soltaron
y quedaron pegados en el
lienzo . Entonces
dibuje un nido de pajaro"
Picasso (1881-1973)
y quedaron pegados en el
lienzo . Entonces
dibuje un nido de pajaro"
Picasso (1881-1973)
domingo, 7 de febrero de 2010
La cruz de San Andres - Camilo José Cela
//La vida no tiene argumento porque tampoco tiene costumbre , la vida suele ser siempre desacostumbrada y monotona , la logica del argumento discurre por camino distinto a su reciedumbre o a su debilidad //
//Yo no soy sino una mujer amarga , lo sé bien y me duele no poco reconocerlo y declararlo ante quien quiera oirme , yo soy una mujer decepcionada y sin conformidad , una mujer que se refugia en el amor de un perro , a mi me gustan todos los machos , de esto no quiero ni hablar porque estoy horra de sentimientos pero no de aprensiones ni remordimientos de conciencia , que Dios me ayude , para mi se hundieron ya para siempre los luminosos deseos de lograr el control de la mente , el entendimiento de los beneficios de la humildad para gobernar la respiracion del aire y acceder a la paz por la relajacion , nose lo que digo , que Dios me perdone , siempre tuve el estomago y los bronquios delicados , yo adivino que debe ser muy duro sacrificar un hijo propio de tu carne por obediencia , la obediencia deberia ser pecado , pero Abraham se disponia a hacerlo cuando le salvo la fé //
//-¿Tú crees que se puede morir sin fe bastante?
-No , si creyeses en la vida con pasion , si te agarrases a la vida como una lapa , serias inmortal , pero al primer desmayo te moririas entre las carcajadas de los tuyos , todos sentados en el suelo , todos vestidos de limpio y todos borrachos //
//Matty , el dia de suy boda , estaba más fea que nunca , a Betty Boop le había pasado lo mismo , se conoce que las bodas les desbarataba las conciencias , ¡cualquiera sabe!, les desnivela las tres potencias del alma , la memoria para masturbarse en la mas sordidas cocinas , el entendimiento para ni intentar siquiera explicar nada a nadie y la voluntad para salir huyendo sin volver la cabeza //
//El ajusticiado no siempre tiene la dignidad del cerdo , que muere blasfemando , rugiendo , aborreciendo y odiando , jamas las víboras verdes de Kinikdeliberi odiaron con más reverente maestría , el cerdo no perdona jamás al matarife al que , si pudiera , degollaría con el mismo cuchillo de hoja ancha con el que se le desangra parsimoniosamente , también con mucha crueldad e inquina , hasta la muerte , hay condenados a morir en el patíbulo , en el tajo , en la horca , en la guillotina , en el garrote , en la silla eléctrica , que sonríen al verdugo , que se esfuerzan por caerles inútilmente simpáticos.//
//"No temáis a los placeres porque tampoco la imbecilidad os ha de redimir de nada"//
//Yo soy una mujer desmoralizada y con muy poca resignación a quien gustan todos los machos , pero no lo puedo decir en voz alta , declaro que soy rica en aprensiones y pobrisima en sentimientos , yo ya no puedo hacer más cosa que dejarme llevar por la vida hasta la muerte , nadie se regodea jamás bastante en el encanto de las estaciones intermedias , ya no deseo gobernar mi cabeza ni sonreir al déspota que nos perdona la vida cada mañana , sólo me queda agradecer la caridad y dejarme comer por el vergonzoso insecto de la murmuracion , de la adiestrada e inclmente murmuración , yo hago oidos sordos al rumor de la mar , ese eco difuso que me acompañará hasta después de muerta//
//Yo no soy sino una mujer amarga , lo sé bien y me duele no poco reconocerlo y declararlo ante quien quiera oirme , yo soy una mujer decepcionada y sin conformidad , una mujer que se refugia en el amor de un perro , a mi me gustan todos los machos , de esto no quiero ni hablar porque estoy horra de sentimientos pero no de aprensiones ni remordimientos de conciencia , que Dios me ayude , para mi se hundieron ya para siempre los luminosos deseos de lograr el control de la mente , el entendimiento de los beneficios de la humildad para gobernar la respiracion del aire y acceder a la paz por la relajacion , nose lo que digo , que Dios me perdone , siempre tuve el estomago y los bronquios delicados , yo adivino que debe ser muy duro sacrificar un hijo propio de tu carne por obediencia , la obediencia deberia ser pecado , pero Abraham se disponia a hacerlo cuando le salvo la fé //
//-¿Tú crees que se puede morir sin fe bastante?
-No , si creyeses en la vida con pasion , si te agarrases a la vida como una lapa , serias inmortal , pero al primer desmayo te moririas entre las carcajadas de los tuyos , todos sentados en el suelo , todos vestidos de limpio y todos borrachos //
//Matty , el dia de suy boda , estaba más fea que nunca , a Betty Boop le había pasado lo mismo , se conoce que las bodas les desbarataba las conciencias , ¡cualquiera sabe!, les desnivela las tres potencias del alma , la memoria para masturbarse en la mas sordidas cocinas , el entendimiento para ni intentar siquiera explicar nada a nadie y la voluntad para salir huyendo sin volver la cabeza //
//El ajusticiado no siempre tiene la dignidad del cerdo , que muere blasfemando , rugiendo , aborreciendo y odiando , jamas las víboras verdes de Kinikdeliberi odiaron con más reverente maestría , el cerdo no perdona jamás al matarife al que , si pudiera , degollaría con el mismo cuchillo de hoja ancha con el que se le desangra parsimoniosamente , también con mucha crueldad e inquina , hasta la muerte , hay condenados a morir en el patíbulo , en el tajo , en la horca , en la guillotina , en el garrote , en la silla eléctrica , que sonríen al verdugo , que se esfuerzan por caerles inútilmente simpáticos.//
//"No temáis a los placeres porque tampoco la imbecilidad os ha de redimir de nada"//
//Yo soy una mujer desmoralizada y con muy poca resignación a quien gustan todos los machos , pero no lo puedo decir en voz alta , declaro que soy rica en aprensiones y pobrisima en sentimientos , yo ya no puedo hacer más cosa que dejarme llevar por la vida hasta la muerte , nadie se regodea jamás bastante en el encanto de las estaciones intermedias , ya no deseo gobernar mi cabeza ni sonreir al déspota que nos perdona la vida cada mañana , sólo me queda agradecer la caridad y dejarme comer por el vergonzoso insecto de la murmuracion , de la adiestrada e inclmente murmuración , yo hago oidos sordos al rumor de la mar , ese eco difuso que me acompañará hasta después de muerta//
viernes, 5 de febrero de 2010
La tabaquería – Fernando Pessoa
No soy nada.
Nunca seré nada.
No puedo querer ser nada.
A parte de eso, tengo en mí todos los sueños del mundo.
Ventanas de mi cuarto,
del cuarto de uno de los millones en el mundo que nadie sabe quién es
(y de saberse, ¿qué sabrían?),
dais al misterio de una calle cruzada constantemente por gente,
a una calle inaccesible a todos los pensamientos,
real, imposiblemente real, cierta, desconocidamente cierta,
con el misterio de las cosas bajo las piedras y los seres,
con la muerte manchando de humedad las paredes y blanqueando
los cabellos a los hombres,
con el Destino que guía el carro de todo por el camino de nada.
Estoy hoy vencido, como si supiese la verdad.
Estoy hoy lúcido, como si estuviese a punto de morir,
y no tuviese más hermandad con las cosas
que la de una despedida, tornándose esta casa y este lado de la calle
en el convoy de un tren, y el silbido de su partida
desde dentro de mi cabeza,
sacudidos mis nervios y chirriantes mis huesos al arrancar.
Hoy estoy perplejo, como quien pensó y halló y olvidó.
Hoy estoy dividido entre la lealtad que debo
a la Tabaquería del otro lado de la calle, como cosa real por fuera,
y a la sensación de que todo es sueño, como cosa real por dentro.
Fracasé en todo.
Como no hice ningún propósito, tal vez todo fuese nada.
Con el aprendizaje que me dieron,
me descolgué por la ventana trasera de la casa.
Fui al campo con grandes propósitos.
pero allí sólo encontré yerbas y árboles,
y si había gente era igual a la otra.
Abandono la ventana, me siento en una silla. ¿En qué he de pensar?
¿Qué sé yo lo que seré, yo, que no sé lo que soy?
¿Ser lo que pienso? ¡Pienso ser tanta cosa!
¡Y hay tantos que piensan ser la misma cosa que no podrán serla
tantos!
¿Genio? En este momento
cien mil cerebros se conciben en sueños genios como yo,
y la historia no señalará, ¿quién sabe? ni a uno,
ni quedará sino estiércol de tantas conquistas futuras.
No, no creo en mí.
¡En todos los manicomios hay tantos locos descerebrados con tantas
certezas!
Yo, que no tengo ninguna certeza, ¿soy más cierto o menos cierto?
No, ni en mí...
¿En cuántas buhardillas y no buhardillas del mundo
no están en esta hora genios-para-sí-mismos soñando?
¿Cuántas aspiraciones altas y nobles y lúcidas
—sí, verdaderamente altas y nobles y lúcidas—,
y quién sabe si realizables,
nunca verán la luz del sol real ni llegarán a oídos de nadie?
El mundo es de quien nace para conquistarlo
y no para quien sueña que puede conquistarlo, aunque tenga razón.
He soñado más que cuanto Napoleón hizo.
He abrazado contra el pecho hipotético más humanidades que Cristo.
Hice filosofías en secreto que ningún Kant escribió.
Pero soy, y tal vez seré siempre, el de la buhardilla,
aunque no viva en ella;
seré siempre el que no nació para eso;
seré siempre tan sólo el que tenía cualidades;
seré siempre el que esperó que le abriesen la puerta al pie de una
pared sin puerta
y cantó la cantiga del Infinito en un gallinero,
y escuchó la voz de Dios en un pozo cerrado.
¿Creer en mí? No, ni en nada.
Derrámeme la Naturaleza sobre la cabeza ardiente
su sol, su lluvia, el viento que me despeina el cabello,
y lo demás que venga si viene o tuviera que venir, o no venga.
Esclavos cardíacos de las estrellas,
conquistamos todo el mundo antes de levantarnos de la cama;
pero nos despertamos y él es opaco,
nos levantamos y él es ajeno,
salimos de la casa y él es la tierra entera,
más el sistema solar y la Vía Láctea y lo Indefinido.
(Come chocolatinas, pequeña;
¡Come chocolatinas!
Mira que no hay más metafísica en el mundo que la de las
[chocolatinas.
Mira que todas las religiones no enseñan más que la confitería.
¡Come, pequeña sucia, come!
¡Si pudiese yo comer chocolatinas con la misma verdad con que tú
las comes!
estaño,
arrojo todo al suelo, como arrojé la vida.)
Pero al menos queda de la amargura de lo que nunca seré
la caligrafía rápida de estos versos,
pórtico quebrado hacia lo Imposible.
Mas al menos dedico a mí mismo un desprecio sin lágrimas,
noble al menos por el gesto de largueza con que arrojo
la ropa sucia que soy, sin motivo, para el discurrir de las cosas,
y me quedo en casa sin camisa.
(Tú que consuelas, que no existes y por eso consuelas,
o diosa griega, concebida como estatua con vida,
o patricia romana, de improbable nobleza y nefasta,
o princesa de trovadores, gentilísima y colorida,
o marquesa del siglo dieciocho, escotada y distante,
o cocotte célebre del tiempo de nuestros padres,
o no sé qué moderno —no concibo bien qué—,
todo eso, sea lo que sea, que seas, si puede inspirar ¡qué inspire!
Mi corazón es un balde vacío.
Como invocan espíritus los que invocan espíritus me invoco
a mí mismo y nada encuentro.
Me acerco a la ventana y veo la calle con una nitidez absoluta.
Veo las tiendas, veo las aceras, veo los coches que pasan
veo los entes vivos vestidos que se cruzan,
veo los perros que también existen,
y todo esto me pesa como una condena al destierro,
Y todo esto me es ajeno, como todo.)
Viví, estudié, amé y hasta creí,
y hoy no hay mendigo al que no envidie sólo por no ser yo.
A cada uno miro los andrajos y las llagas y la mentira,
y pienso: tal vez nunca vivieses ni estudiases ni amases ni creyeses
(porque es posible hacer la realidad de todo eso sin hacer nada
de eso);
tal vez hayas existido apenas, como una lagartija a quien cortan
el rabo
y es sólo un rabo retorciéndose más acá de la lagartija.
Hice de mí lo que no supe,
y lo que pude hacer de mí no lo hice.
El disfraz que vestí era equivocado.
Me tomaron enseguida por quien no era, y no lo desmentí,
y me perdí.
Cuando quise arrancarme la máscara,
estaba pegada a la cara.
Cuando la arrojé y me vi en el espejo, ya había envejecido.
Estaba borracho, y no sabía vestir el disfraz que no me había
quitado.
Arrojé la mascara y dormí en el vestuario
como un perro tolerado por la gerencia
por ser inofensivo
Y voy a escribir esta historia para probar que soy sublime.
Esencia musical de mis versos inútiles,
quién pudiera encontrarte como cosa que yo hice,
y no quedarme siempre enfrente de la Tabaquería de enfrente,
pisoteando la conciencia de estar existiendo,
como una alfombra en la que un borracho tropieza
o el capacho que los gitanos robaron y no valía nada.
Pero el Dueño de la Tabaquería llegó a la puerta y se quedó
en la puerta.
Lo miro con la incomodidad de la cabeza vuelta
y con la incomodidad del alma que mal entiende.
Él morirá y yo moriré.
Él dejará el letrero, yo dejaré versos.
Un día morirá el letrero también y mis versos también.
Después morirá la calle donde estuvo el letrero,
y la lengua en que fueron escritos los versos.
Morirá después el planeta girante en que todo esto sucedió.
En otros satélites de otros sistemas cualquier cosa como gente
continuará haciendo cosas como versos y viviendo debajo
de cosas como letreros.
Siempre una cosa frente a la otra,
siempre una cosa tan inútil como la otra,
siempre lo imposible tan estúpido como lo real,
siempre el misterio del fondo tan cierto como el sueño del misterio
de la superficie,
siempre esto o siempre otra cosa o ni una cosa ni otra.
Pero un hombre entró en la Tabaquería (¿para comprar tabaco?),
y la realidad plausible cae de repente sobre mí.
Me incorporo a medias enérgico, convencido, humano,
y voy a intentar escribir estos versos en los que digo lo contrario.
Enciendo un cigarro al pensar en escribirlos
y saboreo en el cigarro la liberación de todos los pensamientos.
Sigo el humo como una ruta propia,
y gozo, en un momento sensitivo y adecuado,
la liberación de todas las especulaciones
y la conciencia de que la metafísica es una consecuencia de estar
mal dispuesto.
Después me reclino en la silla
y sigo fumando.
Hasta que el Destino me lo permita continuaré fumando
(Si me casase con la hija de mi lavandera
tal vez fuese feliz.)
Visto esto, me levanto de la silla. Me acerco a la ventana.
El hombre salió de la Tabaquería (¿guarda el cambio en el bolsillo
del pantalón?).
Ah, lo conozco: es el Esteves sin metafísica.
(El Dueño de la Tabaquería asoma a la puerta.)
Como por instinto divino, el Esteves se volvió y me vio.
Hizo una señal de adiós, le grité ¡Adiós, Esteves!, y el universo
se reconstruye en mí sin ideal ni esperanza, y el Dueño de la
Tabaquería sonríe.
Nunca seré nada.
No puedo querer ser nada.
A parte de eso, tengo en mí todos los sueños del mundo.
Ventanas de mi cuarto,
del cuarto de uno de los millones en el mundo que nadie sabe quién es
(y de saberse, ¿qué sabrían?),
dais al misterio de una calle cruzada constantemente por gente,
a una calle inaccesible a todos los pensamientos,
real, imposiblemente real, cierta, desconocidamente cierta,
con el misterio de las cosas bajo las piedras y los seres,
con la muerte manchando de humedad las paredes y blanqueando
los cabellos a los hombres,
con el Destino que guía el carro de todo por el camino de nada.
Estoy hoy vencido, como si supiese la verdad.
Estoy hoy lúcido, como si estuviese a punto de morir,
y no tuviese más hermandad con las cosas
que la de una despedida, tornándose esta casa y este lado de la calle
en el convoy de un tren, y el silbido de su partida
desde dentro de mi cabeza,
sacudidos mis nervios y chirriantes mis huesos al arrancar.
Hoy estoy perplejo, como quien pensó y halló y olvidó.
Hoy estoy dividido entre la lealtad que debo
a la Tabaquería del otro lado de la calle, como cosa real por fuera,
y a la sensación de que todo es sueño, como cosa real por dentro.
Fracasé en todo.
Como no hice ningún propósito, tal vez todo fuese nada.
Con el aprendizaje que me dieron,
me descolgué por la ventana trasera de la casa.
Fui al campo con grandes propósitos.
pero allí sólo encontré yerbas y árboles,
y si había gente era igual a la otra.
Abandono la ventana, me siento en una silla. ¿En qué he de pensar?
¿Qué sé yo lo que seré, yo, que no sé lo que soy?
¿Ser lo que pienso? ¡Pienso ser tanta cosa!
¡Y hay tantos que piensan ser la misma cosa que no podrán serla
tantos!
¿Genio? En este momento
cien mil cerebros se conciben en sueños genios como yo,
y la historia no señalará, ¿quién sabe? ni a uno,
ni quedará sino estiércol de tantas conquistas futuras.
No, no creo en mí.
¡En todos los manicomios hay tantos locos descerebrados con tantas
certezas!
Yo, que no tengo ninguna certeza, ¿soy más cierto o menos cierto?
No, ni en mí...
¿En cuántas buhardillas y no buhardillas del mundo
no están en esta hora genios-para-sí-mismos soñando?
¿Cuántas aspiraciones altas y nobles y lúcidas
—sí, verdaderamente altas y nobles y lúcidas—,
y quién sabe si realizables,
nunca verán la luz del sol real ni llegarán a oídos de nadie?
El mundo es de quien nace para conquistarlo
y no para quien sueña que puede conquistarlo, aunque tenga razón.
He soñado más que cuanto Napoleón hizo.
He abrazado contra el pecho hipotético más humanidades que Cristo.
Hice filosofías en secreto que ningún Kant escribió.
Pero soy, y tal vez seré siempre, el de la buhardilla,
aunque no viva en ella;
seré siempre el que no nació para eso;
seré siempre tan sólo el que tenía cualidades;
seré siempre el que esperó que le abriesen la puerta al pie de una
pared sin puerta
y cantó la cantiga del Infinito en un gallinero,
y escuchó la voz de Dios en un pozo cerrado.
¿Creer en mí? No, ni en nada.
Derrámeme la Naturaleza sobre la cabeza ardiente
su sol, su lluvia, el viento que me despeina el cabello,
y lo demás que venga si viene o tuviera que venir, o no venga.
Esclavos cardíacos de las estrellas,
conquistamos todo el mundo antes de levantarnos de la cama;
pero nos despertamos y él es opaco,
nos levantamos y él es ajeno,
salimos de la casa y él es la tierra entera,
más el sistema solar y la Vía Láctea y lo Indefinido.
(Come chocolatinas, pequeña;
¡Come chocolatinas!
Mira que no hay más metafísica en el mundo que la de las
[chocolatinas.
Mira que todas las religiones no enseñan más que la confitería.
¡Come, pequeña sucia, come!
¡Si pudiese yo comer chocolatinas con la misma verdad con que tú
las comes!
estaño,
arrojo todo al suelo, como arrojé la vida.)
Pero al menos queda de la amargura de lo que nunca seré
la caligrafía rápida de estos versos,
pórtico quebrado hacia lo Imposible.
Mas al menos dedico a mí mismo un desprecio sin lágrimas,
noble al menos por el gesto de largueza con que arrojo
la ropa sucia que soy, sin motivo, para el discurrir de las cosas,
y me quedo en casa sin camisa.
(Tú que consuelas, que no existes y por eso consuelas,
o diosa griega, concebida como estatua con vida,
o patricia romana, de improbable nobleza y nefasta,
o princesa de trovadores, gentilísima y colorida,
o marquesa del siglo dieciocho, escotada y distante,
o cocotte célebre del tiempo de nuestros padres,
o no sé qué moderno —no concibo bien qué—,
todo eso, sea lo que sea, que seas, si puede inspirar ¡qué inspire!
Mi corazón es un balde vacío.
Como invocan espíritus los que invocan espíritus me invoco
a mí mismo y nada encuentro.
Me acerco a la ventana y veo la calle con una nitidez absoluta.
Veo las tiendas, veo las aceras, veo los coches que pasan
veo los entes vivos vestidos que se cruzan,
veo los perros que también existen,
y todo esto me pesa como una condena al destierro,
Y todo esto me es ajeno, como todo.)
Viví, estudié, amé y hasta creí,
y hoy no hay mendigo al que no envidie sólo por no ser yo.
A cada uno miro los andrajos y las llagas y la mentira,
y pienso: tal vez nunca vivieses ni estudiases ni amases ni creyeses
(porque es posible hacer la realidad de todo eso sin hacer nada
de eso);
tal vez hayas existido apenas, como una lagartija a quien cortan
el rabo
y es sólo un rabo retorciéndose más acá de la lagartija.
Hice de mí lo que no supe,
y lo que pude hacer de mí no lo hice.
El disfraz que vestí era equivocado.
Me tomaron enseguida por quien no era, y no lo desmentí,
y me perdí.
Cuando quise arrancarme la máscara,
estaba pegada a la cara.
Cuando la arrojé y me vi en el espejo, ya había envejecido.
Estaba borracho, y no sabía vestir el disfraz que no me había
quitado.
Arrojé la mascara y dormí en el vestuario
como un perro tolerado por la gerencia
por ser inofensivo
Y voy a escribir esta historia para probar que soy sublime.
Esencia musical de mis versos inútiles,
quién pudiera encontrarte como cosa que yo hice,
y no quedarme siempre enfrente de la Tabaquería de enfrente,
pisoteando la conciencia de estar existiendo,
como una alfombra en la que un borracho tropieza
o el capacho que los gitanos robaron y no valía nada.
Pero el Dueño de la Tabaquería llegó a la puerta y se quedó
en la puerta.
Lo miro con la incomodidad de la cabeza vuelta
y con la incomodidad del alma que mal entiende.
Él morirá y yo moriré.
Él dejará el letrero, yo dejaré versos.
Un día morirá el letrero también y mis versos también.
Después morirá la calle donde estuvo el letrero,
y la lengua en que fueron escritos los versos.
Morirá después el planeta girante en que todo esto sucedió.
En otros satélites de otros sistemas cualquier cosa como gente
continuará haciendo cosas como versos y viviendo debajo
de cosas como letreros.
Siempre una cosa frente a la otra,
siempre una cosa tan inútil como la otra,
siempre lo imposible tan estúpido como lo real,
siempre el misterio del fondo tan cierto como el sueño del misterio
de la superficie,
siempre esto o siempre otra cosa o ni una cosa ni otra.
Pero un hombre entró en la Tabaquería (¿para comprar tabaco?),
y la realidad plausible cae de repente sobre mí.
Me incorporo a medias enérgico, convencido, humano,
y voy a intentar escribir estos versos en los que digo lo contrario.
Enciendo un cigarro al pensar en escribirlos
y saboreo en el cigarro la liberación de todos los pensamientos.
Sigo el humo como una ruta propia,
y gozo, en un momento sensitivo y adecuado,
la liberación de todas las especulaciones
y la conciencia de que la metafísica es una consecuencia de estar
mal dispuesto.
Después me reclino en la silla
y sigo fumando.
Hasta que el Destino me lo permita continuaré fumando
(Si me casase con la hija de mi lavandera
tal vez fuese feliz.)
Visto esto, me levanto de la silla. Me acerco a la ventana.
El hombre salió de la Tabaquería (¿guarda el cambio en el bolsillo
del pantalón?).
Ah, lo conozco: es el Esteves sin metafísica.
(El Dueño de la Tabaquería asoma a la puerta.)
Como por instinto divino, el Esteves se volvió y me vio.
Hizo una señal de adiós, le grité ¡Adiós, Esteves!, y el universo
se reconstruye en mí sin ideal ni esperanza, y el Dueño de la
Tabaquería sonríe.
jueves, 4 de febrero de 2010
Burzum - Contemplando a las hijas del firmamento
Me pregunto cómo será el invierno
tras una primavera que nunca veré
me pregunto como será la noche
tras un día que nunca veré
Me pregunto cómo sería la vida
con una luz que nunca veré
me pregunto como sería la vida
con un dolor que dura eternamente
En cada noche hay una negrura diferente
cada noche deseo poder volver
a la época en que cabalgaba
a traves de los bosques de la antiguedad
En cada invierno hay un frio diferente
en cada invierno me siento tan viejo
tan viejo como la noche
tan viejo como el frio de la muerte
Me pregunto cómo sería la vida
tras una muerte que nunca veré
me pregunto por qué la vida ha de ser
una vida que dura eternamente
Me pregunto como sería la vida
tras una muerte que nunca veré
Me pregunto por qué la vida ha de ser
una vida que dura eternamente
Autor : Varg Qisling Larsson Vikernes
tras una primavera que nunca veré
me pregunto como será la noche
tras un día que nunca veré
Me pregunto cómo sería la vida
con una luz que nunca veré
me pregunto como sería la vida
con un dolor que dura eternamente
En cada noche hay una negrura diferente
cada noche deseo poder volver
a la época en que cabalgaba
a traves de los bosques de la antiguedad
En cada invierno hay un frio diferente
en cada invierno me siento tan viejo
tan viejo como la noche
tan viejo como el frio de la muerte
Me pregunto cómo sería la vida
tras una muerte que nunca veré
me pregunto por qué la vida ha de ser
una vida que dura eternamente
Me pregunto como sería la vida
tras una muerte que nunca veré
Me pregunto por qué la vida ha de ser
una vida que dura eternamente
Autor : Varg Qisling Larsson Vikernes
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